jueves, 29 de abril de 2010

Tomemos las Armas - 07 - Con la cabeza en alto

La importancia del uso del casco.

· En el trabajo.

· Al andar en moto o bicicleta.

· Al jugar deportes rudos.

Un golpe en la cabeza puede ser mortal.

Así también sucedía con el soldado romano; la cabeza debía estar bien protegida.

Ir sin casco a la batalla era un suicidio.

Uno puede salir vivo de una flecha en un brazo o pierna, puede sobrevivir sin un pié o sin una mano… pero la cabeza es una parte delicada; debe estar protegida.

En la Biblia, la cabeza es vista como una parte especial de la persona completa.

Es la cabeza donde se recibe la bendición de Dios:

Salmo 23:5

…Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando…

Es la cabeza donde se representa la protección de Dios

Salmo 140:7

Jehová Señor, potente salvador mío, Tú pusiste a cubierto mi cabeza en el día de batalla.

Es la cabeza en lugar donde se descarga la ira de Dios

Salmo 68:21

Ciertamente Dios herirá la cabeza de sus enemigos,

La testa cabelluda del que camina en sus pecados.

Jeremías 23:19

He aquí que la tempestad de Jehová saldrá con furor; y la tempestad que está preparada caerá sobre la cabeza de los malos.

Por eso mismo, no sólo el soldado sino todo hombre corre peligro cuando su cabeza no está protegida, especialmente en éste mundo tan hostil y en medio de la batalla espiritual que nos rodea.

Pablo nos sigue animando a tomar las armas y luchar con valor la batalla espiritual de cada día.

Efesios 6:17

Y tomad el yelmo de la salvación.

Nadie está a salvo…
Sin el Yelmo de la salvación

Solicitemos al capitán que nos otorgue el casco de la salvación.

¿Por qué nadie esta a salvo?

A través de Efesios podemos encontrar al menos 3 razones por las que nadie está a salvo a menos que reciba de Dios el YELMO de la SALVACIÓN

1. Porque Dios aborrece al pecador.

Efesios 2:17

17Y vino y anunció las buenas nuevas de paz a vosotros que estabais lejos, y a los que estaban cerca…

Si fueron necesarias Buenas nuevas de PAZ, se entiende que antes de esas buenas noticias de PAZ, lo que existía era CONFLICTO.

Conflicto entre Dios y el PECADO del HOMBRE

Pero más específicamente conflicto entre DIOS y El HOMBRE PECADOR.

La frase “Dios odia al pecado pero ama al pecador” NO es del todo Bíblica.

Salmo 7:11

11Dios es juez justo,

Y Dios está airado contra el impío todos los días.

(Checar siguientes)

Éste es el dilema de Dios, Dios NO PUEDE PERDONAR AL PECADOR.

DIOS es juez justo.

Si alguien asesinara a tus hijos, y por fin logras encontrar al asesino, y lo llevas ante la ley; y el juez que juzga el caso dijera: YO soy un juez de amor, odio los delitos de éste asesino, pero amo al asesino así que lo vamos a perdonar ¿Te parece?

¡NO! Señor Juez, usted tiene que hacer cumplir la ley.

¿VES? Dios no puede simplemente perdonar y ponerle final feliz a la historia; sería traicionarse a sí mismo, sería contradecir su carácter: Él es JUEZ justo.

Alguien dirá, mi Dios es un Dios de amor.

Y digo ¡Amén! Dios es un Dios de amor, pero también de Justicia.

No puedes tomar sólo lo que te gusta de Dios, debes conocerlo tal como es: AMOR, sí y también JUSTO.

NADIE está a salvo delante de un Dios JUSTO.

Efesios 5:3

3Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como conviene a santos; 4ni palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen, sino antes bien acciones de gracias. 5Porque sabéis esto, que ningún fornicario, o inmundo, o avaro, que es idólatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios. 6Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia.

Efesios 2:1

1Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, 2en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, 3entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás.

Romanos 3:23

23por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, 24siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, 25a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados, 26con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús.

Dios es el JUSTO

Y es EL que JUSTIFICA.

Dios soportó todos los pecados del hombre desde Adán hasta poder castigarlos en JESÚS su hijo.

Es como si la ley de Dios hubiera estado agregando crimen tras crimen a la justicia de Dios y en la cruz, Dios por fin ejecutó una justicia perfecta sobre su HIJO.

Debes entenderlo, todo aquel que no centra su fe en Jesús y se rinde a él con toda su vida, fuerzas, tiempo, recursos, con TODO lo único que hace al vivir es exponerse porque DIOS LO ABOMINA.

¿Qué necesitas?
EL CASCO DE LA SALVACIÓN

¿Cómo puedo saber si tengo el casco de la salvación?

Si aborreces lo que Dios aborrece.

¿Aborreces tu pecado?

¿Aborreces al que miras al espejo?

Salmo 97:10

Los que amáis a Jehová, aborreced el mal;

El guarda las almas de sus santos;

De mano de los impíos los libra.

Lucas 14:26

26Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo.

JOB 42:5

5De oídas te había oído;

Mas ahora mis ojos te ven.

6Por tanto me aborrezco,

Y me arrepiento en polvo y ceniza.

2. Porque el pecador es testarudo

La testarudez del pecador consiste en que sabiendo que corre peligro, anda como si nada malo fuera a pasarle.

La testarudez del pecador consiste en que sabiendo que Cristo viene no se pone a cuentas con él.

Es como ver que el oficial de tránsito está enfrente de nosotros y aún así burlar el semáforo.

La Biblia retrata al testarudo como NECIO.

Muchas partes, especialmente PROVERBIOS contrastan al necio con el sabio; y la Biblia deja bien en claro que el principio de la sabiduría es EL TEMOR AL SEÑOR.

Proverbios 1:7

El principio de la sabiduría es el temor de Jehová;

Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.

Es peligroso andar sin ser salvos, porque no sólo Dios puede dejar caer su ira, sino que además nuestra propia testarudez nos lleva al peligro.

Somos tan testarudos que jugamos con fuego.

Tan testarudos que creemos que somos la excepción a la regla.

Creemos que nuestro camino es derecho cuando está más chueco que nada.

Eso es testarudez.

Efesios 5:15

15Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, 16aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. 17Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.

¿Cómo puedo andar seguro? Con el YELMO de la SALVACIÓN

¿Cómo se que lo tengo? Si anhelas dejar de ser testarudo y tomar decisiones sabias que agraden a Dios, necesitas arrepentirte y pedirle a Dios que quite la necedad de tu corazón.

Efesios 4:1

1Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados.

3. Porque el pecado
y el pecador serán castigado

El pecado y el pecador tendrán un fin.

Aquel día, muchos querrán buscar a Dios pero será muy tarde.

Aquel día puede ser hoy, al rato, mañana… nadie sabe, por eso es un peligro andar sin el casco de la salvación.

Proverbios 1:24

24Por cuanto llamé, y no quisisteis oír,

Extendí mi mano, y no hubo quien atendiese,

25Sino que desechasteis todo consejo mío

Y mi reprensión no quisisteis,

26También yo me reiré en vuestra calamidad,

Y me burlaré cuando os viniere lo que teméis;

27Cuando viniere como una destrucción lo que teméis,

Y vuestra calamidad llegare como un torbellino;

Cuando sobre vosotros viniere tribulación y angustia.

28Entonces me llamarán, y no responderé;

Me buscarán de mañana, y no me hallarán.

29Por cuanto aborrecieron la sabiduría,

Y no escogieron el temor de Jehová,

Efesios 6:13

13Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes.

Los que tienen puesto el CASCO de la SALVACIÓN están listos para el regreso de Cristo, sea el día que sea, sea a la hora que sea.

¿TU Estas listo?

Si aún no te arrepientes, temo por ti: tu alma peligra.

Si vives en la testarudez, tu vida peligra.

Si vives apartado de Cristo pero piensas que tienes la vida asegurada; cuidado, tu vida peligra

Necesitas protección, necesitas el casco de la salvación.

Si ya lo has recibido de Cristo, no te lo quites nunca.

TEME al SEÑOR, es amor pero justo también.

Camina en la SABIDURÍA, si hay testarudez en tu corazón, repréndela y échala fuera.

Prepárate para el final, cualquier día el Señor dirá “Se acabó”.

Tomemos las armas, no vivamos como si nada ocurriera a nuestro alrededor, recuerda que tenemos enemigos espirituales; recuerda que hay una batalla constante que pelear, si no estás peleando ponte abusado:

Efesios 5:14

Por lo cual dice:

Despiértate, tú que duermes,

Y levántate de los muertos,

Y te alumbrará Cristo.

¿Dónde obtengo un casco de salvación?

Ese es el problema.

No los venden; uno no entra a la tienda a comprar un casco de salvación.

Estas semanas, ha habido noticias de gente que ha estado comprando vacunas para la influenza. Pero para su sorpresa, tales vacunas no están a la venta.

Las autoridades ya lo dijeron “no se deje engañar, cuando tengamos la vacuna, no la venderemos, será gratuita”

Lo mismo te digo respecto al casco de la salvación; no se vende, necesitas recibirlo, necesitas que alguien te lo regale.

Ese alguien es Jesús.

¿Cómo lo obtienes? VEN a ÉL

Reconoce que eres pecador, reconoce que eres testarudo; pídele que te transforme y que te proteja con su justicia.

Si lo recibes, ve a la batalla, pelea en nombre del Señor, deja de vivir para ti.

2 Timoteo 2:4

Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado.

Si ya lo recibiste, no dejes de pelear, no te dejes dominar por la pereza espiritual; toma las armas y mantente en la batalla hasta que llegue el final.

¡Ponte el casco! ¡Pídeselo a Jesús!
Y dirígete a la batalla.

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